En Nosotros somos el paro somos muy golos@s, pero en más de una ocasión nos ha pasado que hemos hecho un bizcocho y a los días se nos ha quedado duro sin haberlo terminado.
Si también te ha pasado, ¡no lo tires! Hoy te enseñamos algunas ideas sobre cómo aprovechar el bizcocho duro.
- Hacer un pudding. Bate 4 huevos y mézclalos con 50 gramos de azúcar y un tetra brick de leche (preferiblemente entera). Desmiga el bizcocho duro y empápalo en esta mezcla. Haz un caramelo con agua y azúcar y viértelo en un molde. Echa encima el bizcocho previamente troceado y empapado y mételo al horno al baño maría durante unos 45 minutos. ¡Un pudding de aprovechamiento fácil y delicioso!
- Bombones caseros. Mezcla en una batidora 40 gramos de mantequilla (previamente derretida), con 60 gramos de leche condensada y los trozos de bizcocho. Introduce media hora la masa generada en el congelador y después, podrás trabajar mejor con ella haciendo bolitas. Úntalas en fideos de chocolate, frutos secos picados o coco rallado y tendrás unos riquísimos bombones caseros.
- Galletas. Corta en láminas finas el bizcocho para poder hacer galletas con la masa ya que ésta ha quedado dura. Ponlas sobre una bandeja de horno y vuelve a hornear hasta que queden crujientes. Puedes decorarlas añadiendo chocolate caliente o un poco de azúcar por encima.
- Base de tarta. Otra forma de usar el bizcocho duro es utilizarlo como base de una tarta; si es demasiado alto, córtalo al gusto. Emborráchalo un poco o unta un poco de leche y añádele por encima los ingredientes principales de tu tarta (flan, natillas, queso, fruta, chocolate…)
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