Aprovechar la parte verde del puerro
- Acompañamiento crujiente. Uno de los usos que le doy a esta parte del puerro que muchas veces desechamos es como acompañamiento crujiente en segundos platos. Para hacerlo bien y que el sabor sea delicioso, aprovecho las partes que están más frescas. Lo corto a tiras alargadas y finas y lo paso por una sartén con aceite de oliva. A veces, lo mezclo con tiras muy finas de otras verduras como calabacín o pimiento verde.
- Caldos. Aunque muchas nos hemos acostumbrado a usar los caldos envasados para nuestras recetas (por comodidad y falta de tiempo), siempre que puedo intento que los caldos sean caseros. Mi favorito es el que preparo con los huesos del pollo, la parte verde del puerro y un par de zanahorias; lo cuezo durante unos 50 minutos y está riquísimo.
- Decoración. En el día no suelo dedicar demasiado tiempo a la presentación de lo que cocino, pero cuando tengo invitados sí que me gusta que tengan el aspecto de un auténtico chef. Por eso, la parte verde de los puerros la troceo en tiras finitas y las congelo. Cuando hago platos con carne o puré de patata, me gusta decorarlos con unas tiras de la parte verde del puerro.
- Crema. Con una patata, una cebolla, un tetra brick pequeño de nata y la parte verde de unos 8 o 10 puerros, puedes hacer una deliciosa crema. Pones primero la cebolla y la parte del puerro en una cazuela a pochar; después añades la patata y dejas que cueza unos 20 minutos. Pásalo por la batidora, añade nata y salpimenta. ¡Delicioso y útil para consumirlo en cualquier época del año!
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